Hola, hola , hola bienvenidos a los cuentos de Ojito precioso::!
Ojito de caramelo,
Ojito color marrón.
Para mi enfermero favorito...!
Mi cuento es para todos los niños del mundo que se sientan identificado con este pequeño personaje, que son solidarios, colaboradores, respetuosos y tienen tantos valores morales.
UN SIMPÁTICO ENFERMERO.
Había una vez, en un país muy especial, un niño que siempre estaba queriendo aprender lo que los adultos hacían para crecer cada día más.
Este pequeño, era muy ordenado,le gustaba mantener las cosas en su lugar. Cada día ayudaba a su mamá o a la abuela a recoger la basura, secar el agua cuando se derramaba, sacudir el polvo de los muebles y un sin fin de cosas que ellas siempre le agradecían.
Un día su abuelita enfermó, y el pequeño Andrés se sintió preocupado.
Pidió a Dios por la salud de ella para que mejorara rápidamente.
Para que su abuelita se sintiera mejor, Andrés corría a buscar cualquier elemento que necesitara en ese instante, siempre atento a prestar su colaboración, cada noche insistía en llevarla a la cama y darle su medicina.
Andrés se mostraba entusiasmado con su tarea de enfermero. Se sentaba en la cama gemela a esperar que su abuelita se durmiera y él así poder irse a dormir.
Por tanta dedicación su tía y abuela le llamaron el simpático enfermero, aunque cuando veía una gotita de sangre huía de la habitación con desespero.
Qué bueno que niños con espíritu de solidaridad todavía existen en nuestro medio.
Dios bendiga a mi enfermero Andrés.